Longás es una tranquila localidad situada en las Altas Cinco Villas, lindando con la provincia de Huesca con un censo de 33 habitantes.
En plena Val d’Onsella, está bañada por el río del mismo nombre y descansa bajo la Sierra de Santo Domingo, declarada Paisaje Protegido por su relevancia paisajística y medioambiental, una zona ideal para sumergirse en la naturaleza más hermosa e imponente.
Aunque seguramente estuvo poblada desde la antigüedad por la cercana presencia de yacimientos neolíticos y de la Edad de Bronce, Longás aparece citada por primera vez en el siglo X y alcanzó su máximo esplendor en los siglos XII y XIII, época medieval que, junto con su carácter montañés y las casonas nobles, define su casco urbano.
Cuenta con una conexión a internet de 100Mbps y dispone de un pequeño coworking al que no le falta de nada, perfecto para teletrabajar.
Cuenta con médico y enfermería un día a la semana. Dispone de bar-restaurante y hostal, así como un entorno perfecto para la práctica de diferentes deportes en la naturaleza. Su carrera más famosa “No hay pitera” en la que se sube al pico de Santo Domingo (el cielo de las Cinco Villas) es toda una declaración de intenciones.
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